En un momento de la fotografía de calle en el que todo el mundo busca la coincidencia más sorprendente, un uso maestro de la luz, y en definitiva y con mis palabras “hacer un fotón de la leche”, me he dispuesto a escribir sobre Bobby Salinas.
Bobby documenta su trabajo como azafata en un tren. Y punto.
Esa sencilla forma de ver la vida, es lo que me motivó a coger el móvil y escribirla. Una vez localizada (viva Instagram!) y tras varios mensajes, me encuentro que Bobby es una persona alegre, muy habladora, y sobre todo con gran pasión por la fotografía. De origen chileno (pero canadiense de pura cepa), ella misma se define como un culo inquieto (comenta varias veces que no puede estar sentada ni un momento… me lo creo). Es por ello, que después de trabajar en VICE en 2001 y como autónoma años mas tarde, comenzó a buscar algo que la permitiera viajar, ser autosuficiente y estar en continuo movimiento.
Y así es como comienza su aventura en una línea ferroviaria canadiense.

Armada con una discreta Ricoh GRII y de su Iphone, y como si de una pequeña biografía se tratara, Bobby ha ido fotografiando su vida diaria en el tren: desde pasajeros que se duermen, incidentes en cabina… hasta selfies y retratos de sus compañeros. Pequeños fragmentos recogidos durante años que componen, quizás sin haberlo buscado, un potente proyecto tanto a nivel documental como personal.

Es curioso comprobar como a través de sus dos cuentas de Instagram (@thebobbyrazzi y @thattrainlady), puedes conocer mucho sobre ella. Navegando te topas con fotos de su vida entre raíles pero también escenas de su vida cotidiana: y es precisamente donde te das cuenta que todo en su proyecto, es real. Selfies en el WC de un vagon, retratos de sus compañeras en su apartamento y viajes, se mezclan convirtiendo al espectador en una especie de voyeur de una vida entre raíles.

Llegados a este punto, vistas estas fotografías que acompañan el artículo, y una vez he llegado a conectar con la autora, me pregunto si no lo estaremos haciendo mal. A diario buscamos “ese punto diferenciador” en la fotografía de calle que nos dé un toque personal, que nos diferencie del resto y que artísticamente se valore (sobre todo a través de muchos “Likes” en Instagram). Buscamos la técnica, ese procesado coherente con nuestro estilo. Nos frustramos buscando rizar el rizo y perdemos todo lo que hace que fotografiar sea divertido.
A lo mejor simplemente hay que ser como Bobby, coger la cámara y dejar que el viaje nos lleve a un mundo cotidiano, pero lleno de sorpresas.





Bobby Salinas es @thebobbyrazzi y @thattrainlady
Actualmente sigue trabajando en su proyecto Train Life. Imágenes seleccionadas de sus cuentas en Instagram se están editando actualmente en una serie cohesiva que comprenderá su primera revista programada para 2018 y libro en 2019.

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